¿Sabes el origen del nombre de El Rastro de Madrid?
http://www.dontstopmadrid.com/2015/04/origen-nombre-El-Rastro.html
El Rastro de Madrid es de esas cosas que consideramos "muy nuestras", considerándolo una de las costumbres madrileñas por excelencia desde hace cientos de años. No hay domingo en el que El Rastro de Madrid no sea un hervidero de personas dispuestas a comprar y vender todo tipo de artículos. Aquí se puede encontrar de todo y precisamente, ahí está la magia.
Antes de existir El Rastro, los madrileños acudían a la Plaza Mayor y a la Puerta del Sol para comprar ropa usada en los mercados públicos a través de los puestos de los llamados "ropavejeros". Sin embargo este tipo de comercio proliferó más de lo esperado dentro de la Corte, por lo que acabó por prohibirse y comenzaron a trasladarse a las zonas más periféricas.
Los primeros documentos que hablan de El Rastro de Madrid datan ni más ni menos que de 1740, como punto para vender, cambiar o menudear con prendas de segunda mano. Aunque la extensión actual es enorme (de hecho supera los 3.000 puestos), en su día los puestos se agolpaban en las inmediaciones de los mataderos y curtidores de piel.
¿Pero de dónde viene el nombre de "El Rastro"? Diferentes fuentes indican que pudo deberse al rastro de sangre que las reses dejaban al ser degolladas y vendidas al por mayor en las inmediaciones del matadero. A su vez, también señalan que el término "Rastro" se utilizaba para designar a las afueras, es decir, aquellas zonas alejadas de la Corte.
Antes de existir El Rastro, los madrileños acudían a la Plaza Mayor y a la Puerta del Sol para comprar ropa usada en los mercados públicos a través de los puestos de los llamados "ropavejeros". Sin embargo este tipo de comercio proliferó más de lo esperado dentro de la Corte, por lo que acabó por prohibirse y comenzaron a trasladarse a las zonas más periféricas.
Los primeros documentos que hablan de El Rastro de Madrid datan ni más ni menos que de 1740, como punto para vender, cambiar o menudear con prendas de segunda mano. Aunque la extensión actual es enorme (de hecho supera los 3.000 puestos), en su día los puestos se agolpaban en las inmediaciones de los mataderos y curtidores de piel.
¿Pero de dónde viene el nombre de "El Rastro"? Diferentes fuentes indican que pudo deberse al rastro de sangre que las reses dejaban al ser degolladas y vendidas al por mayor en las inmediaciones del matadero. A su vez, también señalan que el término "Rastro" se utilizaba para designar a las afueras, es decir, aquellas zonas alejadas de la Corte.
Foto de diego_mlg
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